julio 26, 2011

No cometas más errores



Estabas delante mío. Vestías con jean, polo negro y camisa blanca (sí, te veías sexy), además las zapatillas "nuevas" que te compraste una de las últimas veces que nos vimos. Me acerqué a ti y te saludé de inmediato, sentí el perfume que usabas y no había cambiado en tres años, quise tocar tu cabello, todo ruloso y un poco corto (sabías que me gustaba, me acordé cuando lo comparaba con el de Nick Jonas), entonces me reí y tú me miraste sin entender.

Decidimos sentarnos en aquel murito de la resi, ese murito donde tiempo atrás me tenías abrazada y veíamos a los abuelitos ir por todas partes, donde me hiciste escuchar lo de palomita buena onda y reíamos, donde me dijiste 'Te amo, pequeña, eres todo lo que necesito', y también ese murito donde me senté a llorar cuando terminamos. Corrección: me terminaste.

Ninguno de los dos quería hablar primero, pero en unos segundos tuviste que decir algo, después de todo fuiste tú quien me citó. Me recordaste cuando tenía 15 años y tú 18. Sí, me recordaste todo el tiempo que pasamos (aunque solo me hiciste recordar todo lo bueno). Inmediatamente te hice saber que ya no tenía 15 años, que ahora tenía 18 y tú 21, las cosas cambian.

- No todo ha cambiado - dijiste, entonces quise saber qué es lo que no había cambiado.
- Lo que siento por ti - contestaste, esperando que agrege algo.
- Nada, nada sientes tú por mí porque eso es lo que sentías antes: Nada - te dije un poco cortante y fastidiada.
- Deja de decir tonterías niñita - dijiste sin darle demasiada importancia a mis palabras, mientras me mirabas con dulzura.
- Estoy aquí porque tengo que decirte que he cometido tantos errores... errores que ya no estoy dispuesto a cometer, quise venir a pedirte perdón porque bien sabes que fui una mierda, he sido muy malo contigo, te hice mucho daño y quiero que me perdones, sé que por mi culpa estuviste deprimida un buen tiempo, luego cambiaste totalmente. ¿Dónde está la niñita tierna y cariñosa que eras? Ahora pareces indiferente a todo - agregaste admitiendo cierta culpa.
- No seas pendejo, ¿No acabas de decir que me cambiaste, imbecil? - te dije mientras te lanzaba una mirada de desprecio.
- ¡Perdóname! - Repetías suplicante.
- ¿Sabe Miriam que estás conmigo? - quise saber.
- No. ¿Sabe tu chico que estás conmigo? - preguntaste como sabiendo de antemano la respuesta.
- No. ¿Quieres dejar de cometer errores y no le dices a tu enamorada que estás con tu ex? - te dije con un tono hostil.
- Es que yo a Miriam la amo, es la mujer de mi vida, no sé qué haría sin ella. Pero no me hubiera permitido verte. Luego de solucionar las cosas contigo no cometeré más errores - dijiste esperanzado.
- ¿Qué quieres?, ¿perdón? Bueno, te perdono. En serio, sabes que te amé y sufrí mucho, pero eso queda en el pasado. Ahora estoy bien, estoy enamorada realmente, soy muy feliz con él y él sí me quiere, así que ya no tiene caso. Te perdono y te deseo lo mejor - hice un intento de sonrisa. En verdad esperaba que le vaya bien, las cosas entre ambos deberían quedar bien para seguir con nuestras vidas, con caminos distintos.
- Me alegro pequeña, me alegra que alguien pueda hacer lo que yo no pude. Te quiero, Meylin y eso es lo que no cambia, mi palomita bonita, jajaja, lo siento bebé, me acuerdo cuando te decía esas cosas. Que seas muy feliz - Me sonreiste y encontré en tus palabras una verdadera sinceridad.

De pronto te acercas, yo entré en pánico. Sabía lo que vendría (No, please, no lo eches a perder). No tuve más tiempo así que me limité a dejarlo pasar. Sentí tu respiración, tus labios se acercaron pronto a los míos, estaba nerviosa, temblaba y tú también. Descubrimos que no pasó nada, no sentimos nada, ni el más mínimo aprecio o amor que pude haber sentido hace tres años, estoy segura que tú también lo sabías. Nada, eso era. No sentimos nada, te diste cuenta al igual que yo. Me separé de ti y me abrazaste, te abracé. Lo entendimos.

- Ahora vete y no cometas más errores - te ordené. Tú te levantaste, sonreíste, me guiñaste el ojo y desapareciste.

Yo me quedé con la cabeza gacha, pensando en lo que había hecho y si estaba dispuesta a contárselo, ¿De qué forma podría decirselo?, ¿se molestará? No quiero que se moleste, eso no fue más que un hasta nunca, aunque de todos modos siento culpa. Cerré los ojos un momento y respiré hondo, pensaba en cómo se lo diría... Eso es! Encontré la forma de decirlo, cuando abrí los ojos estaba en mi cama, un gol de Uruguay me había despertado, gracias al cielo solo fue un sueño.

4 comentarios:

  1. "A veces sueño que es un sueño esta triste realidad,
    a veces sueño que mis sueños realidad se han hecho,
    hasta despierto busco la manera de soñar......
    pues solo así puedo ver este mundo derecho...♫ "

    pues has mejorado tu manera de redactar, es más interesante... con respecto al tema soñar con tu ex y encima besarlo a pesar de no haber sentido nada tal vez signifique que no lo has olvidado del todo.

    ResponderEliminar
  2. @Jean p. Tincopa: Hola :)

    Es una posibilidad. No creo que lo olvide, pero ya no lo quiero y se pudo comprobar con ese beso. Por cierto, me hizo acordar algo que 'cierta persona' hizo hace tiempo. Tú entiendes.

    Tal vez sea que no lo he soñado... Puede ser, ¿no?

    Saludos!

    ResponderEliminar
  3. @Lala Hoola, pues dudo mucho qe la situación de "esa persona" haya sido la misma ya que son contextos muy diferentes y la diferencia qe hay entre la duración de cada relación es bastante amplia :)... así qe quieres dejar con la incertumbre a tus lectores dando a entender qe tal vez no fue un sueño, ja ingenioso de tu parte, bueno suerte en todo.

    ResponderEliminar
  4. @Jean p. Tincopa: Que sea más tiempo no quiere decir que sea necesariamente más intenso ;)

    Gracias por la suerte, para ti también.

    Saludos :)

    ResponderEliminar

Así que voy a perder mi tiempo, y voy a quemar mi mente.